viernes, 30 de julio de 2010

Crítica de acto: inauguración de la ampliación de la L5


Nos juntamos en el vestibulo de la nueva estación del Carmel mas de cien personas, en la entrada cientos de curiosos intentan ver algo o admiran los coches oficiales.

De Vall de Hebrón llegarón en metro Montilla, Hereu y Joaquim Nadal. Se les hizo un pasillo para que accedieran al escenario. Nadal se saltó el protocolo y elogió el buen trabajo realizado, la demostración de que en Catalunya se puede hacer obra pública de buena calidad. La verdad es que lo hizo bien y sin papeles.

Luego habló Hereu que sigue expresandose con cierta violencia, como rebotado con el mundo. Y finalmente Montilla consiguió que la gente empezara a hablar entre ellos y que se iniciara un rumor de fondo cada vez mas audible. Que malo es con los discursos. Y eso que los lleva escritos.

Lo tuvimos que ver en los monitores porque los chicos son pequeñitos y el escenario no era muy alto. no hubo canapés, ni siquiera refrigerio, lo que se entiende viendo el ambiente dentro y fuera de la empresa sobre este tipo de gastos.

Quise estar en esta inauguración porque creo que a todos los que apostamos por un gobierno de izquierdas nos trastocó ese enorme agujero que apareció un día en el Carmel. Un agujero fruto del mal gobierno del tardopujolismo, donde se daban las obras públicas en función del porcentaje que se llevaban algunos y en que no se realizaba ningún control sobre el trabajo de las subcontratas y de las subcontratas de las subcontratas.

Aun recuerdo como un conocido me contaba que estaba en un estudio diseñando la línea 9. Un estudio en que todos eran ilegales.

El metro ya llega al Carmel un barrio obrero (que no conflictivo ni marginal como decían algunas teles de Madrid en su día)y que se merece poder llegar al centro de Barcelona en un medio de transporte moderno y rápido.

Este tanto se lo pueden apuntar los sociatas. No se lo podemos negar. Se ha hecho mas metro en los últimos que en los 23 años de CiU

lunes, 19 de julio de 2010

Nostalgia del FIB

Por primera vez en once años el FIB consume su último día de conciertos, la gente cruza la nacional por la pasarela, se ensucia las zapatillas con el polvo rojo del camino y resopla en la cuesta, toma cerveza a litros, da saltos en el escenario verde y suda en las carpas, y yo no estoy allí.

Casi me dejo arrastrar por la nostalgia, pero todo lo que he leído hasta hoy en la prensa no ha hecho sino confirmar que el FIB de este año no está a la altura, y que menos mal que no hemos ido.

Eso sí, que nos quiten lo bailado, y saltado, y bebido. Qué bien lo hemos pasado.

Ha sido difícil escoger una sola foto de cada FIB, y podría haber sido cualquier otra.

Mi primer FIB fue en el 99, y fui con mis amigos ingleses. No tenía amigos de aquí con quien ir. Perdí las pocas fotos que tenía, o están en papel a saber dónde.
En 2000 volví con los mismos amigos, aunque también andaban por allí unos amigotes de Barcelona y acababa las noches en las carpas con ellos. Tampoco tengo documento gráfico.

En 2001 había conocido a Lineker y Boyscout en una fiesta. El principio de todo.
Al lado de Ceci andará Margarita, si es que no estaba haciendo esta foto.
Mis amigos ingleses también estaban.

En 2002 cambiamos Albert por Alberto.
Había conocido a Paloma en Wyeth, y ella y Anna empezaron a engrosar el círculo. Boyscout andaba por allí, como en casi todas las ediciones.

De 2003 tampoco hay fotos. ¿Qué pasó?


2004 fue el último año para mis amigos ingleses, y los que me acompañan en la foto aún no estaban juntos ;-)

2005, el FIB en al que me emperré en ir pese a que no hacía ni dos meses que me había operado. Condenada a comer arroz y cuscús cada día. El cirujano hasta me sugirió que me pusiera un casco de los de fútbol americano. No hizo falta.
Rayuelo y el feo de entrecopas también estuvieron.

2006 tenía uno de los mejores carteles de la historia del FIB y ninguno de mis compinches en ediciones anteriores quería ir. Menos mal que el Barón me "presentó" a Walkiria un mes antes del festival, y fuimos ella y yo dos días y el Barón el día de Morrissey.

2007, primer FIB intersimbólico, fue de !!!

2008, el FIB que fuimos VIP.

2009, el último, esto fue pocas horas antes de lo que podía haber sido una catástrofe. No salimos volando, pero el viento se llevó las pocas razones que nos quedaban para volver.

martes, 13 de julio de 2010

Historia breve de unas vacaciones en ibiza


Santa Eularia. vacaciones de familia y jubilados europeos. Tranquilidad, poca fiesta.

Calas maravillosas: Cala Comte y Benirràs. Perfecta puesta de sol en Sa Pedrera.

Eivissa ciudad: tiendas de discotecas, de ropa pija y restaurantes. La muralla interesante.

Super paella en Cala Salada.

Formentera. Solo pudimos disfrutar de la increible casa de la Walkiria y de una comida típica. Luego pillamos la primera playa que encontramos y aquello parecía Castelldefels playa pero con italianos en lugar de nengs. Hace falta volver para cambiar mi opinión del lugar.

Obviamente no he ido a Sant Antoni, ni a las discos ni al Café del Mar.

Sitios en general con gente pero sin aglomeraciones.

He visto la roja cuando he podido en la habitación y cuando me ha dejado Gael. Lástima que no lo haya podido vivir, porque seguro que pasas años antes de que se consiga algo parecido. Por cierto, la tele alemana es la única que aun da el mundial en abierto.

Conclusiones:

- Ibiza es una isla pequeñita llena de contrastes, donde aun puedes vivir al margen de la fiesta y las discotecas y disfrutar de sus hermosas playas y conocer un interior aun auténtico.

- Las vacaciones familiares son diferentes a las de soltero. Vives solo el día y compartes con toda esa gente que no es guay ni divertida, aquella que no nos molaba nada jaja. Pero te has de integrar, que remedio.

- He podido compartir con mi hijo días enteros y he valorado el inmenso curro que tiene Olga.

Y eso es todo. Volveremos sin duda.

lunes, 12 de julio de 2010

Se acabó lo que se daba...

... pero ganamos el mundial!

De La Fortuna, con sus fumarolas y erupciones, nos fuimos el miércoles, creo, ya voy perdiendo la cuenta. Lo único que hicimos fue asustarnos con el volcán, ir de compras y bañarnos en unas "río-termas" en medio de una tormenta con rayos y truenos, con una familia de aulladores intentando echarnos de sus dominios y el volcán soltando erupciones al ladito. Vaya, que no podemos hacer una normal. Aun y así el "arremójate la tripa" fue genial. Son piscinitas hechas en un río de agua termal, calentita. Sí, sí, ya pensamos que un arrebato del volcán igual nos quedábamos allí como un huevo duro. Un paraíso para Boyscout.

De allí madrugón para ir a Puerto Viejo, llegamos a tiempo para sentarnos en un restaurante y ver como España eliminaba a Alemania mientras comíamos.
Por la tarde, como no, cayó la del pulpo. De nuestro pulpo, del pulpo Paul supimos en Punta Cahuita, un extremo del parque, nos lo contó el guía. Nuestro pulpo han sido los chaparrones que nos han caído cada tarde cuando hemos llegado a un nuevo destino. Más los de propina. Pues eso, llovió el día que llegamos, y con el madrugón, poco más que cenar hicimos.
Al día siguiente, ruta por el parque, festival de aulladores, mariposas morpho (la azul, es tan bonita...) y cangrejos, no sabéis lo divertido que puede ser ver cómo se van metiendo en sus agujericos a tu paso. El otro día, playa Cocles, paraíso caribeño.
Fiesta, la justa: happy hours de turno, imperiales heladas, y un par de homenajes gastronómicos inesperados. Pijolandia ha llegado a Jaironlandia.
Jairons, a patadas. El más guapo, el camarero de un bar, el resto, graciosos. Nos hemos reído mucho viendo cómo ligaban con inglesas de las que van al FIB. Pero no hemos frecuentado las discos en las que suelen salir de caza. Ni falta que hacía.

Hoy en San José nuestro único objetivo era ver el partido en un buen bar, y si hemos ganado, pues tanto mejor. San José es más feo que pegarle a un padre, por cierto.

Mañana a las 4.30 nos recogen para llevarnos al aeropuerto. Si no nos pasa nada, y cruzaremos los dedos porque hemos estado al borde del desastre muchas veces, el martes y trece a las 9 de la mañana aterrizaremos en el Prat.

¡Ya tengo ganas de veros!

martes, 6 de julio de 2010

Las tontas del bote atacan de nuevo

De Manuel Antonio guardamos buen recuerdo de sus happy hour de daiquiris, del millón de perezosos que vimos en el parque nacional y las playas. Lo demás, pura guirilandia para gringos.

La siguiente parada en la ruta fue Monteverde, llegamos tarde, casi a las cinco que equivale a las ocho o nueve de España, y se puso a diluviar, qué raro, así que nos limitamos a reservar la excursión al Parque Monteverde y cenar en un buen restaurante cercano al lodge (chulísimo, por cierto).

Él día fue un estrés de los buenos. En el parque nos tocó un buen guía (cuáquero o descendiente de) para las tres solitas, un lujo, y vimos, aparte de nueve especies de colibríes, el quetzal. Afortunadas es poco. El bosque nuboso es especial, y disfrutamos mucho de las tres horas y pico de la ruta.

Volvimos en autobús a Santa Elena, con tiempo para ir al banco a cambiar euros, comer, e ir a Selvatura a pasear por una ruta con puentes colgantes.

Y como nos dejaron con tiempo, pudimos hacer la ruta nocturna que habíamos reservado a mediodía. En el lodge estaban tan encantados con nosotras (por las comisiones que se llevan de cada reserva que te hacen) que en la última, la nocturna, les dijeron que éramos estudiantes y nos ahorramos 3$ cada una.
De nuevo tuvimos mucha suerte con el guía, y vimos un puerco-espín, un perezoso, una serpiente, una tarántula, guatusas y cucarachas varias. Muy recomendable también, lo de andar por esos bosques de noche tiene su miga. Yo, que no me metería de noche en el de mi pueblo ni harta de vino...

De las montañas de cuáqueros, a las playas infestadas de perroflautas. Montezuma mola, aunque según cómo es demasiado hippy guarro. Hay surferos, sí, pero sobre todo hay colguetis.
Llovió la noche que llegamos, pero al día siguiente, que teníamos contratada la excursión a Isla Tortuga, hizo un día espatarrante, vimos mogollón de peces de colores, y el primer Jairon: el cocinero que preparaba la comida tras el snorkel, de manual. Mulato fibrado por el curro con ojos de color miel aguada. Que se llamara Pedro es lo de menos. Que le echara el ojo a una teutona rubia y pizpireta, también.

Ayer nos despedimos del Pacífico con una puesta de sol espectacular, tras un día de sol, nubes y lluvia (benditos tamarindos bajo los que nos refugiamos en la playa) y con dos margaritas en Chico's, la única disco del pueblo, donde ayer pinchaba un colguetis que lo hacía realmente bien hasta que empezó con la salsa.

Ahora estamos en La Fortuna viendo las fumarolas del volcán Arenal. Acaba de soltar una que al lado de las del islandés no llega ni a bocanada de cigarrillo, pero teniéndolo tan cerca no necesito más.