martes, 10 de junio de 2008

Yo la tengo

La propuesta es simple: coges una banda formada por gente simpática y sin divismos, la pones a tocar frente a un público reducido y avisado para que se traiga las preguntas de casa y se establece un encuentro real entre ambos.
Apolo estaba lleno de sillas de ikea de a 5€, no conté, pero a menos de 20 personas por fila y dudo que hubiera más de 30 filas. 600 más los del lateral, supongo que 1000 fans de Yo la tengo sí habría. Unos más fans que otros, claro. Yo no soy "tengófila" (juro que el palabro no es mío, lo leí en algún sitio), me es imposible recordar el título de más de cinco de sus canciones, pero los he visto un par de veces y nunca me han defraudado, así que verlos en formato acústico-íntimo era un caramelito que casi no me como. Suerte que el Inquilino no hizo caso de los agoreros que anunciaban entradas agotadas semana y media antes de que efectivamente se agotaran.
Abrieron con Sugarcube (de esta me sé el título), versión lenta, pero mis pies se iban, y luego otra. Entonces en público pudo empezar a hacer preguntas. Hubo de todo, de lo primero, el porque del nombre (querían algo que fuera ofensivo y sonara bien, en wiki cuentan otra cosa), si cuantas veces se lo habían escrito mal (James tiene una colección de fotos), el motivo de un título, de una versión... La canción que siguiera acababa de responder. Una chica pidió poder darle un abrazo a Georgia (deseo concedido). Comentarios simpáticos acerca de que no son una banda de "clap along" cuando el público se había lanzado a dar palmas (creo que fue en Mr Tough, la canción las pide) o de que nunca han hecho canciones con intros largas en las que poder soltar un rollo con mensaje y que por eso usaba la canción de otro para hacerlo. Referencias políticas, Obama o cualquiera que esté decidido a prohibir los "Don't look back concerts", salvo que éste sea McCain, pero sin dar la brasa.
La parte estrictamente musical se compuso de canciones de todos sus állbumes, supongo, yo sólo tengo cuatro. Nada que reprochar a la selección. Eché de menos Black flowers y me divirtió que tocaran "Everlasting love" después de que les preguntaran por qué la habían tocado en Barcelona la última vez que vinieron. O algo así. Quiero creer que mi memoria no me falla, porque me suena haber estado en ese concierto. A saber. El formato era acústico, y aun y así, y para estupor repetido del Inquilino, lograban distorsionar. Ruido y melodía se alternaron y entrecruzaron. Con grupos así da gusto ir de concierto un lunes.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"As time goes by I know it's gonna happen
I know it's going away
Gonna take its toll, gonna take its toll
Gonna take my time"
A veces me repito,lo sé,pero la culpa no fue del Cha-cha-cha...

Pd.otra brillante crónica de Gwen...y van...

Anónimo dijo...

Like a wave, my love got to my life. Like a wave of fire and tender. Like a waveeeeee!!!!